No romanticemos la criminalidad

“La gente no roba por necesidad. Por necesidad la gente se levanta temprano y se va a trabajar. No romanticemos la delincuencia”; así cita la frase anónima que muchos describen como clasista, pero es la que inspira este escrito.

¿Y si aumenta cada vez más el crecimiento del desempleo? ¿y si cada vez más se devalúa la divisa local? Son preguntas que atacan a quienes van en contra de lo antes dicho. Otros afirman que es muy fácil decir "que trabajen", sin conocer la marginación y la necesidad. Por otro lado, hay quienes comentan que da rabia ver a un pueblo pasar hambre, mientras que otros que ni siquiera escribir saben son quienes poseen todo el poder.

Sin embargo, los millones de personas alrededor del mundo que no tienen nada para comer, pero que hacen cualquier cosa, menos cometer actos delictivos, para sobrevivir y mantenerse, estarían en desacuerdo con estas opiniones. Es inimaginable la cantidad de personas sin qué abastecerse, e increíble debe ser quienes dentro de ese rango no tienen como opción robar y asaltar. Y es que, nada justifica quitarle a los demás lo que tanto han trabajado, por lo que han sacrificado horas de sueño u ocio, minutos que pudieron dedicar a su familia o amigos; no obstante, estuvieron trabajando digna y justamente para obtener lo que hoy poseen.

Es muy doloroso ver que de la nada y tan sencillamente te arrebaten cosas que te has esforzado para conseguir, y aún más doloroso cuando con ellas se llevan una vida, como si quitarte tus pertenencias no fuera suficiente.

No sé qué ocurre cuando la situación llega a un límite en que la única alternativa que queda es el hurto de alimentos para dar de comer a la familia de uno y a sí mismo. Se puede pensar que, por pura honradez y en tal extremo, lo preferible es que se mueran de hambre para no infringir la ley ni tomar lo que a uno no le pertenece, pero llegar a este punto a veces no es tan necesario si realmente se sacrifican para buscar el pan diario dignamente, porque creo que más son aquellos que delinquen por querer las cosas fáciles que por necesidad.

Quizás no sepa mucho sobre análisis sociales, estudios psicológicos o las estadísticas económicas, pero de algo sí estoy segura y es que, robar nunca será una alternativa u opción para las personas honestas, con principios y valores erigidos firmemente. Y aún más segura estoy de que robar no es la solución, sino unirnos para entre todos lograr una mejor sociedad donde existan oportunidades para todos aquellos que las quieran, pero sobre todo un conglomerado social fundamentado en valores, siendo primordial el amor y el respeto.

Por: Yadimir Crespo